El éxito del tratamiento exige que el paciente siga atentamente las instrucciones. El primer mes es crucial a la hora de adoptar el hábito de uso del aparato (en general, crear un hábito requiere de 3 a 4 semanas de uso diario regular). Para motivar al paciente y a su familia, dispone de material adaptado por edades tanto para preadolescentes como para adolescentes. Es importante asegurarse de que el paciente y su familia comprendan que un uso irregular es igual que no estar siguiendo ningún tratamiento.